Por: Susana Alejandra Pérez Blas
El centro cultural Telmex trajo desde Berlín hasta la Ciudad de México, un show clown, lleno de acrobacias y esfuerzo físico, que nos brindan los acróbatas. Es un montaje, lleno de salpicaduras y risas, este show se ha realizado en diferentes países teniendo un éxito taquillero y aquí en la Ciudad de México no pudo ser la excepción. Este majestuoso espectáculo es tanto para niños, jóvenes y adultos, sin duda es un genuino entretenimiento familiar.
Uno de los acróbatas se encuentra entre el público disfrazado de espectador, claro nadie lo conocía, fue entonces cuando la payasita lo invita a subir al escenario y comienza otra parte del show donde sorprende al público con sus malabares y acrobacia en tela.
El centro cultural Telmex trajo desde Berlín hasta la Ciudad de México, un show clown, lleno de acrobacias y esfuerzo físico, que nos brindan los acróbatas. Es un montaje, lleno de salpicaduras y risas, este show se ha realizado en diferentes países teniendo un éxito taquillero y aquí en la Ciudad de México no pudo ser la excepción. Este majestuoso espectáculo es tanto para niños, jóvenes y adultos, sin duda es un genuino entretenimiento familiar.
Los acróbatas realizan sobre y alrededor de unas tinas de baño un refrescante espectáculo que deja a los espectadores sin aliento, ya que son movimientos que ponen en riesgo su vida. Cuentan con una fuerza extraordinaria en todo su cuerpo. “SOAP” es una gran fusión que combina el circo, la comedia y el cabaret en los confines de un cuarto de baño.
El escenario se ilumina y se puede observar 6 bañeras colocadas en diferentes niveles (abajo, medio y arriba), la música comienza; acróbatas, malabaristas, trapecistas y una cantante especialista en opera que armoniza los movimientos, claro que no puede faltar, una simpática payasita que le da el toque perfecto de comedia. Ella se encarga de romper la cuarta pared para así convivir con el público, en el escenario se encuentra una tubería que esta esta truqueada con una manguera adentro para poder aventar chorritos de agua.
Uno de los acróbatas se encuentra entre el público disfrazado de espectador, claro nadie lo conocía, fue entonces cuando la payasita lo invita a subir al escenario y comienza otra parte del show donde sorprende al público con sus malabares y acrobacia en tela.
El escenario queda empapado y es así como el primer acto termina, bajan el telón y tras bambalinas las personas de staff comienzan a secar, y en los camerinos descansan los actores, para así dar paso al último acto, no por ser ya el último acto el riesgo disminuyo.
La función terminó y recibieron una gran ovación, aplausos, gente de pie, todo los espectadores disfrutaron de una función muy diferente a lo que se está acostumbrado a ir a ver.